Hay pocas cosas que sean para toda la vida, sin embargo, alguna hay. Una de ellas es el préstamo para comprar tu vivienda, que, aunque es cierto que no te acompañará toda tu vida, casi. Durante 30 o 40 años estarás pagando mes a mes tu cuota si quieres conservar tu vivienda. Muchas personas creen que las condiciones de este tipo de créditos no se pueden modificar, pero en las siguientes líneas descubrirás que no es del todo cierto y también qué es una novación de hipoteca, la clave para cambiar esas condiciones.
¿Qué es una novación hipotecaria y qué tipos existen?
A lo largo de la vida de un préstamo se pueden dar diferentes circunstancias que lleven a cambiar las condiciones de la hipoteca. Este trámite se conoce como novación de hipoteca.
Consiste en modificar ciertas condiciones del préstamo, pero sin cambiar de banco ni de hipoteca. Estas modificaciones pueden estar relacionadas con los titulares de la hipoteca, los plazos de pago, los tipos de interés o incluso la cantidad adeudada.
¿Qué aspectos se pueden cambiar en una novación hipotecaria?
Aunque ya hemos comentado en el apartado anterior los cambios que se pueden realizar en la hipoteca, a continuación, queremos detenernos en cada uno de ellos para explicarlos bien:
- Tipo de interés. Una de las opciones es cambiar el tipo de interés pactado en el momento de la firma o el diferencial. Se busca conseguir mejores condiciones. Lo normal es que a cambio el banco exija que contrates algún producto.
- Titulares del préstamo. Cuando una pareja se rompe, una de las cuestiones que hay que dilucidar es qué pasa con la hipoteca. Una de las opciones es cambiar la hipoteca de dos titulares a uno. Además del acuerdo entre los miembros de la pareja, se tendrán que negociar las condiciones con el banco. Entre otras, los gastos de quitar un titular de la hipoteca.
- Plazo de amortización. El plazo de amortización se puede cambiar tanto para reducirlo como para ampliarlo. Ten en cuenta que en estos casos también cambiará la cuota mensual.
- Cantidad pendiente. Es posible que necesites ampliar el capital del préstamo. En ese caso, tendrás que negociar también con tu entidad para que analice si es viable o no. Por supuesto, la cuota mensual también aumentará, salvo que al mismo tiempo se incremente el plazo.
Una de las dudas más habituales está relacionada con los gastos de novación de hipoteca. Lo cierto es que cada banco tiene sus propias condiciones, pero en muchos casos sí conllevará costes.
Ahora que ya sabes qué es una novación de hipoteca, solo te queda analizar si es el producto que estás buscando.