A muchas personas les encanta buscar chollos. Consideran que es la mejor opción, ya que supone un ahorro económico, que en algunos casos puede ser considerable. Sin embargo, quizás no siempre sea tan ventajoso. Te invitamos a descubrir si es una buena idea comprar una vivienda por debajo de su valor.
¿Qué significa comprar una vivienda por debajo de su valor?
Aunque cada propietario puede establecer el precio que considere oportuno, el precio de una vivienda depende principalmente de la ubicación, del tamaño y del estado en el que se encuentre. Además, se debe analizar el valor catastral.
De hecho, una misma vivienda puede tener hasta tres precios diferentes:
- Precio de la compraventa. Es el que acuerdan comprador y vendedor para la vivienda.
- Precio de mercado. Es el que establece la tasación.
- Valor catastral. Es el precio real que tiene la vivienda.
Teniendo en cuenta el precio del mercado y el de la compraventa se puede saber si la vivienda esta sobrevalorada o infravalorada. Sin embargo, Hacienda utiliza el valor catastral para establecer la base impositiva, que marcará la valoración que se realice del inmueble en la Declaración de la Renta.
Para establecer el valor catastral de una vivienda se estudian el valor de la construcción en sí, lo que cuesta el suelo, dónde está ubicada y las características de la propiedad. No se puede olvidar que el valor catastral es en la mayoría de los casos inferior al de la compraventa y no se suele tener en cuenta a la hora de establecer su precio.
El valor de mercado se suele establecer teniendo en cuenta la demanda de viviendas en la zona. Se trata de un precio que cambia, en buena medida según lo hace el mercado. Como ya sabes, para conocer esta cifra es necesario tasar la vivienda en cuestión.
Comprar una vivienda por debajo de su valor consiste en adquirir una propiedad con un precio inferior al que marca la tasación. En las siguientes líneas te mostramos si es una buena idea.
¿Es buena idea comprar una vivienda por debajo de su valor?
Comprar una vivienda por debajo de su valor puede tener consecuencias negativas para el comprador y para el vendedor de la vivienda. Cuando llegue la hora de liquidar el ITP, Impuesto de Transmisiones Patrimoniales, puede ser penalizado por la Agencia Tributaria.
Este organismo puede comprobar cuál es el valor de mercado y el catastral de la vivienda. Cuando detecta que la compraventa es inferior, el nuevo y el antiguo propietario tendrán que enfrentarse a algunas obligaciones.
La urgencia por vender una vivienda puede deberse a diferentes circunstancias y llevar a que se establezca un precio por debajo del valor de mercado. Además, al comprador el ahorro le puede parecer muy atractivo.
Sin embargo, ambas partes deben analizar si les compensa actuar así. Solo entonces sabrán si es recomendable comprar una vivienda por debajo de su valor.